30/4/13

La esencia - ¨Pro¨ espacio de aprendizaje colectivo - Alcoy


¨Pro¨ espacio de aprendizaje colectivo.
1) Introducción:
Este proyecto de aprendizaje libre y autogestionado, trata de llevar a cabo
talleres/actividades educativas para niños/as de diversas edades, con facilitadores
educativos que siempre están presentes en el acompañamiento de los/as niños/as, con una
actitud no autoritaria, no directiva, ni intervencionista.
Este proyecto es el inicio de lo que en breve se convertirá en el espacio de aprendizaje
colectivo ¨La Esencia¨ que pretende empezar su actividad en septiembre de 2013 en Alcoy o
alrededores.
2) Metodología:
Totalmente práctica y vivencial. Entendemos a los niños y niñas como personas en proceso
de formación, no como seres receptores de órdenes y normas establecidas. Los principios
didácticos de esta actividad son: la creatividad, la motivación y la imaginación, donde a
través de éstas, aprenderán habilidades y conocimientos en cada una de las áreas de
trabajo que se proponen; siempre respetando los ritmos de maduración de cada niño/a y
sus procesos evolutivos, confiando plenamente en la autorregulación y en la fuerza interna
que empuja a los/as niños/as hacia el conocimiento y descubrimiento del mundo y sus
interrelaciones.
3) Objetivos:
Los objetivos fundamentales son fomentar la creatividad, la comprensión, la capacidad
para contactar con las propias necesidades vitales y habilidades innatas de los/as niños/as
mediante el juego, la expresión corporal, la expresión emocional, el reconocimiento de
emociones, la relajación, la comunicación, la autoestima y las conductas cooperativas,
mediante los valores de apoyo mutuo, igualdad y solidaridad entre ellos/as al realizar
actividades/talleres de forma colectiva.
Como objetivos específicos podríamos destacar:
- Expresión libre de emociones.
- Acercamiento a la naturaleza, mediante el contacto directo con la tierra y su comprensión 
 de los ciclos y procesos naturales.
- Reflexión colectiva, escuchando a los/as compañeros/as, descubriendo otras 
 formas de comunicación, a través de la observación del trabajo de los/as otros/as 
 compañeros/as en todas las fases de las creaciones artísticas, viendo las conexiones 
 entre ciertas expresiones.
- Disfrutar y crecer individualmente y colectivamente, ampliando las relaciones con los/as 
 compañeros/as mediante valores éticos y morales, y la exploración de nuevas 
 sensaciones proporcionadas por el uso de materiales de la propia naturaleza.4) Desarrollo:
Las actividades comenzarán con una parte expositiva en la que se intentará despertar la
curiosidad de los/as niños/as, lo que facilitará la concentración en la actividad; a partir de
aquí se dejará vía libre a la expresión artística .
Las sesiones serán de experimentación y expresión libre, eligiendo los temas por consenso
entre ellos/as, acompañándoles en el proceso practico.
Las actividades tendrán una duración de 9 horas semanales, los lunes, martes y miércoles
desde las 17 horas hasta las 20 horas, durante los meses de mayo y junio. En los meses de
julio y agosto, se estudiará si continuar con el mismo horario o comenzar escuela de
verano por la mañana y mediodia. 
La actividad comenzará a partir del lunes 6 de mayo, en el centro social Cals Flares, en la
calle Forn del vidres nº 10 de Alcoy.
Dichas actividades servirán para la financiación del material del proyecto.
Algunas actividades/talleres destacados son:
- Arte plástica (barro, arcilla, escayola, pasta de modelar, etc)
- Teatro (disfraces, maquillaje, etc)
- Música y danzas del mundo
- Huerto ecológico/biológico
- Conocimiento de los recursos naturales: El agua, el sol, la tierra, etc...
- Construcciones con materiales de la zona (barro, paja, madera, piedras, etc...)
- Excursiones, reconociendo animales y plantas de la zona
- Talleres (espantapájaros, prensa de flores y hojas, papel reciclado, perfumes y 
 cremas, jardín portátil, crear reutilizando materiales, etc.)
5) Fundamentación:
Lo que nos impulsa a realizar este proyecto es principalmente el sentir de que la necesidad
del desarrollo integral de los/as niños/as no es posible si no se produce una fuerte
interacción de estos/as con su entorno natural; creciendo en armonía con la naturaleza,
para que no la vean como algo externo a ellos/as y tengan en cuenta la necesidad de su
conservación. Además, este entorno favorece el desarrollo emocional del niño/a al
descubrir constantemente nuevas sensaciones, su desarrollo psicomotriz, y posibilita ir
construyendo la inteligencia relacional al observar los ciclos de los procesos naturales, las
causa-efecto que acontecen en el medio natural. Con este trabajo se pretende ofrecer una
oportunidad a los/as niños/as de recuperar la humanización perdida, para alcanzar un
mundo mejor, mas respetuoso y “humano”.
6) Aspecto económico:
Las actividades se podrán gestionar/financiar por las aportaciones económicas o
aportaciones de materiales por parte de las familias y su implicación directa con el
proyecto, mediante un sistema económico mancomunado.
Algunas de estas formas son:
– Aportación de material educativo.
– Implicación directa con el proyecto y en la realización de actividades (socios/as).
– Aportación económica por día: 6 euros / 6 ecos. (previo aviso).
– Aportación mínima socio/a: los dos meses, mayo y junio por 120 euros (previo pago).
Abierto plazo de matricula. La matriculación es gratuita.
(hasta el 2 de mayo)
El remanente neto de la liquidación se destinara al proyecto de aprendizaje colectivo 
”La Esencia”.
Mas información en: educacionlibrealcoy@riseup.net

El triunfo de los mediocres (Antonio Fraguas, “Forges”).



Quizá ha llegado la hora de aceptar que nuestra crisis es más que económica, va más allá de estos o aquellos políticos, de la codicia de los banqueros o la prima de riesgo.

Asumir que nuestros problemas no se terminarán cambiando a un partido por otro, con otra batería de medidas urgentes, con una huelga general, o echándonos a la calle para protestar los unos contra los otros.

Reconocer que el principal problema de España no es Grecia, el euro o la señora Merkel.

Admitir, para tratar de corregirlo, que nos hemos convertido en un país mediocre. Ningún país alcanza semejante condición de la noche a la mañana. Tampoco en tres o cuatro años. Es el resultado de una cadena que comienza en la escuela y termina en la clase dirigente.

Hemos creado una cultura en la que los mediocres son los alumnos más populares en el colegio, los primeros en ser ascendidos en la oficina, los que más se hacen escuchar en los medios de comunicación y a los únicos que votamos en las elecciones, sin importar lo que hagan alguien cuya carrera política o profesional desconocemos por completo, si es que la hay. Tan solo porque son de los nuestros.

Estamos tan acostumbrados a nuestra mediocridad que hemos terminado por aceptarla como el estado natural de las cosas. Sus excepciones, casi siempre, reducidas al deporte, nos sirven para negar la evidencia.

- Mediocre es un país donde sus habitantes pasan una media de 134 minutos al día frente a un televisor que muestra principalmente basura.

- Mediocre es un país que en toda la democracia no ha dado un solo presidente que hablara inglés o tuviera unos mínimos conocimientos sobre política internacional.

- Mediocre es el único país del mundo que, en su sectarismo rancio, ha conseguido dividir, incluso, a las asociaciones de víctimas del terrorismo

- Mediocre es un país que ha reformado su sistema educativo tres veces en tres décadas hasta situar a sus estudiantes a la cola del mundo desarrollado.

- Mediocre es un país que tiene dos universidades entre las 10 más antiguas de Europa, pero, sin embargo, no tiene una sola universidad entre las 150 mejores del mundo y fuerza a sus mejores investigadores a exiliarse para sobrevivir.

- Mediocre es un país con una cuarta parte de su población en paro, que sin embargo, encuentra más motivos para indignarse cuando los guiñoles de un país vecino bromean sobre sus deportistas.

- Mediocre es un país donde la brillantez del otro provoca recelo, la creatividad es marginada –cuando no robada impunemente- y la independencia sancionada.

- Mediocre es un país en cuyas instituciones públicas se encuentran dirigentes políticos que, en un 48 % de los casos, jamás ejercieron sus respectivas profesiones, pero que encontraron en la Política el más relevante modo de vida.

- Es Mediocre un país que ha hecho de la mediocridad la gran aspiración nacional, perseguida sin complejos por esos miles de jóvenes que buscan ocupar la próxima plaza en el concurso Gran Hermano, por políticos que insultan sin aportar una idea, por jefes que se rodean de mediocres para disimular su propia mediocridad y por estudiantes que ridiculizan al compañero que se esfuerza.

- Mediocre es un país que ha permitido, fomentado y celebrado el triunfo de los mediocres, arrinconando la excelencia hasta dejarle dos opciones: marcharse o dejarse engullir por la imparable marea gris de la mediocridad.

- Es Mediocre un país, a qué negarlo, que, para lucir sin complejos su enseña nacional, necesita la motivación de algún éxito deportivo.

28/4/13

The Lazy Song

La canción que ahora a Marta le encanta!

Version Original Bruno Mars:



Version de Megan Nicole:

10/4/13

LOS CÁSTIGOS Y LA "SILLA DE PENSAR"


|Poner a un niño de cara a la pared, arrodillado y haciéndole sujetar un par de pesados libros con cada mano no está bien visto. Pegarle es, incluso, ilegal en un gran número de países. En las sociedades occidentales los padres suelen disponer de poco tiempo (y, en ocasiones, de pocas ganas) para buscar otras formas más eficaces de disciplinar a los hijos. De ahí que un programa televisivo nefasto como es la Super Nanny haya tenido tantísimo éxito.

Como los castigos, en el sentido tradicional del término, empiezan a ser políticamente incorrectos, los adultos hemos recurrido no a nuevas estrategias sino a nuevos eufemismos. Hay un castigo clásico llamado “time out” (tiempo fuera) que consiste en aislar durante cierto período de tiempo al niño que se ha portado mal. En primer lugar, deberíamos revisar el concepto de “portarse mal”. ¿Se ha portado mal el niño de dos años que ha derramado el vaso de leche porque todavía no ha terminado de desarrollar su motricidad fina? ¿Se ha portado mal el niño que ha montado un escándalo porque no quería bañarse a la hora que tú has decidido que debía hacerlo? En segundo lugar, deberíamos revisar, también, nuestras normas que, normalmente, son arbitrarias y tienen poco sentido. ¿Es realmente tan importante merendar a las cinco y no a las seis de la tarde? ¿O tendría más sentido que el niño merendara cuando tuviera hambre? ¿Es tan importante ver la tele sólo durante una hora al día? ¿O tendría más sentido negociar con él para que pueda ver su programa favorito completo en vez de disponer sólo de cierta cantidad de tiempo?

Hace unos días, un amigo me contaba que su hijo de cinco años había estado jugando al fútbol dentro de casa y que había roto una bombilla. Su padre (mi amigo) le explicó por qué no era conveniente jugar al fútbol dentro de casa y por qué era peligroso que se hubiera roto la bombilla. Además, le impuso un castigo consistente en no bajar al parque con él a jugar a fútbol por la tarde, tal como habían quedado. Mi amigo no se daba cuenta de que el niño no había tenido ninguna intención de romper nada (ni la bombilla ni las normas familiares); de que, muy probablemente, había tenido suficiente con el susto de ver que la bombilla le caía encima hecha pedazos (no digamos ya de ver el enfado de su padre); y tampoco se daba cuenta de que aunque, en efecto, las acciones tienen consecuencias, el prohibirle bajar al parque no es en absoluto una consecuencia lógica y natural del hecho de haber roto la bombilla. Aplicando este tipo de consecuencias artificiales lo que conseguimos es que nuestros hijos se esfuercen por no ser descubiertos en futuras ocasiones y esto implica que empiecen a mentirnos. Si nuestros hijos confían en nosotros y se sienten seguros en nuestra compañía, nos contarán las cosas que han hecho o que les han pasado. Pero, si no confían en nosotros y no se sienten seguros porque saben que les caerá una “consecuencia”, lo más probable es que no nos lo cuenten. Ni a los dos años, ni a los siete ni a los dieciséis. ¿Es ése el tipo de relación que queremos tener con ellos? Porque es fácil quejarse de lo herméticos que son los adolescentes y no querer darse cuenta de que, quizás, somos nosotros los que hemos alentado esta actitud cuando, de pequeños, los hemos mandado a “pensar” en vez de hablar con ellos.

Aislar al niño por haber incumplido normas que quizás no comprende (y que quizás no tengan ningún sentido) supone una enorme falta de respeto hacia él, además de una humillación totalmente innecesaria (como toda humillación, dicho sea de paso). Se le ha cambiado el nombre al clásico “time out” y ahora se le llama “silla o rincón de pensar”. Con lo cual convertimos el pensar en un castigo. Quiero creer que, en realidad, no queremos que nuestros hijos crezcan con la idea de que pensar es un castigo. Sin embargo, ése es justamente el mensaje que les transmitimos. Es más, durante el tiempo que dura su aislamiento (que, según “expertos” como la Super Nanny ha de ser equivalente a un minuto por año de edad) lo que el niño piensa en realidad es cómo evitar ser descubierto la próxima vez; y la lección que aprende es que gana el más fuerte o el más astuto. De este modo, el niño aprende a calcular el “precio” de sus acciones y a decidir, en cada caso, si vale la pena o no asumir el riesgo.

Desde los años 50, los científicos que han estudiado la disciplina han venido clasificando a los padres en función de que basaran sus actos hacia los niños en el poder o en el amor. La disciplina basada en el poder incluye (o puede incluir) pegar, gritar y amenazar. Los castigos, por supuesto, son una forma de amenaza, un claro chantaje: “si no te acabas la comida, no podrás salir a jugar”, por ejemplo. La disciplina basada en el amor, en cambio, incluye prácticamente todo lo demás. A los lectores interesados en conocer alternativas prácticas y reales al castigo, les recomiendo encarecidamente la lectura de los libros “Por tu propio bien” de Alice Miller, “Crianza incondicional” de Alfie Kohn, “Ser padres sin castigar” de Norm Lee (disponible gratuitamente online), “Padres liberados, hijos liberados” de Adele Faber y Elaine Mazlish y el libro de Rosa Jové sobre las rabietas que está a punto de ser publicado. Para ir abriendo boca, pueden buscar en internet los siguientes artículos: “Cinco razones para dejar de decir muy bien” de Alfie Kohn, “Las rabietas” de Rosa Jové, “Ayudar a los niños a resolver conflictos emocionales” de Naomi Aldort o “Educar sin castigar” publicado por quien suscribe estas líneas en la revista www.atalisdigital.com (pág.47).


article de la Laura Mascaró

8/4/13

Libres